Entendemos que es difícil controlar absolutamente todo lo que comen los hijos, más cuando van a la escuelita o kinder y bueno, lo que siempre decimos es que el hábito es lo de todos los días, y lo demás son excepciones. Así que por unas excepciones no nos pasa nada cuando la mayoría y el HÁBITO es otro más positivo.
Si lo que ofrece en su mayoría la industria contiene ingredientes que no son los que realmente queremos para nuestros hijos, siempre habrán otras opciones, otro tipo de cosas que puedan consumir. Entiendo que de repente hay algo que les gusta mucho y que puede ser esporádico (no como premio claro) pero claro que es “fácil” cumplir con algo práctico, rápido, y que además le gusta. Ahí es donde el punto de que “lo más conveniente para los hijos no necesariamente es lo más fácil para los padres” y es cierto.
Sin embargo, no por eso se le debe de “echar” la culpa a la industria, o a los restaurantes por no tener un menú para niños saludable, o a las escuelas por no prohibir la venta de ciertos productos. Si bien todo eso ayudaría, la verdad es que es nuestra responsabilidad cubrir esta necesidad de los hijos (POR QUE COMER SALUDABLE ES UNA NECESIDAD no un “gusto o una opción). Siempre podemos pedirle (entre muchos) a la escuela que dejen de dar o que den cierto tipo de opción. Siempre podemos dejar de comprar tal o cual cosa que sabemos que no es saludable y buscar otras opciones, y siempre podemos pedir en el restaurant que den más opciones para los niños. Todo es cuestión de pedir. Somos los clientes (de la industria, restaurant y escuelas) así que al cliente lo que pida ¿no? y eso lo podemos hacer claramente.
Los niños también saben disfrutar de la alimentación natural y saludable, pero tenemos que darles las opciones primero que nada, segundo tenemos que ser un ejemplo de que se pueden consumir, y tercero, tenemos que “sobre llevar” el hecho de que se resistan de repente y que eso no es lo más agradable que seguramente puede ser si le das tal cosa procesada que le hace daño pero que lo “entretiene” un ratito….
Aumentar su consumo de verduras, frutas, granos enteros (arroz, frijoles, lentejas etc) agua natural y aguas de sabores caseras es suficiente para que su paladar vaya perdiendo la adicción a ingredientes que resaltan sabores y que son los que impiden que le encuentren el sabor a algo más sencillo como lo natural…. así que SÍ SE PUEDE, sólo es cuestión de insistir, de tener paciencia y de darles opciones, por que los pequeñitos escuchan más su cuerpo de lo que hacemos los adultos y solitos saben que es bueno para ellos y que no lo es.
